Vive Pacífico

Notas de Salud y Bienestar

Nuevo año, nuevos objetivos

Estamos comenzando un nuevo año y de este modo, una nueva página en blanco para visualizar nuestra vida y nuestro entorno. Tener un punto de referencia hacia dónde queremos llegar es la guía para encaminar nuestros intereses personales ya sean laborales, afectivos o relacionados a nuestra personalidad o comportamiento. Esta referencia puede ser tu propia lista de objetivos anuales.

Planifica tus metas para este 2018 sin estresarte y pensando en las que realmente te importan y dándole prioridad a las opciones más saludables y beneficiosas para ti. Ten en cuenta estos consejos:

  1. Plantear los objetivos elaborando frases en positivo. Esto es muy efectivo para cumplirlos. Cuando enfocamos nuestra mente en algo, empezamos a percibirlo más veces que cuando no nos preocupabamos por ello. Incluso pareciese que lo hallamos cotidianamente o en circunstancias cercanas, pero lo que realmente ocurre es que el cerebro siempre buscará hallar coincidencias de tus pensamientos con el exterior. Por lo tanto, es fundamental que tus objetivos del nuevo año sean enunciados en oraciones positivas para que tu mente trabaje en busca de ello. Por ejemplo, en caso quieras bajar de peso, es mejor decir ¨quiero mantener mi peso ideal¨, a ¨no quiero engordar¨ o si quieres estar más activo físicamente, no te digas a ti mismo ¨no seré perezoso este año¨ sino ¨haré deporte regularmente este año¨. Nuestra mente tiene la habilidad de guiarnos para lograr nuestros planes, brindemosle ayuda nosotros mismos reeducando nuestra forma de pensar.

  2. Nuestras metas deben estar bajo control. Con esto no sugerimos que seamos perfeccionistas o incapaces de ser flexibles frente a lo inesperado. Con llevar el control nos referimos a que lo que nos planteamos debe depender solamente de nosotros, porque son nuestras metas, no las de los demás. Somos nosotros los que haremos lo posible para lograrlas, son nuestras acciones y no las de otros las que orientarán nuestro éxito a cumplirlas. Esto también es importante plantearlo desde el enunciado, por ejemplo, podemos desear tener una pareja este año, pero no es posible decidir los sentimientos de un tercero mientras que sí podemos salir más a menudo a nuevos lugares para conocer más gente. Encontremos y enfoquémonos en esos objetivos que dependen de nuestras actividades y decisiones.

  3. La especificación es mejor que la ambigüedad. Si manifestamos objetivos genéricos los resultados podrán ser difusos. Podemos caer en el desorden y no obtener lo que realmente deseábamos. Sé puntual en cuanto a lo que te plantees para este año: pon fechas, horarios, cantidades. Vé la manera que luego pueda ser medible este plan y confirmes que lo lograste. Por ejemplo es difícil saber si fuimos ¨más¨ veces al gimnasio que el año pasado, en cambio, podremos verificar si nuestro objetivo se cumplió si lo planteamos así: ¨iré al gimnasio entre 2 y 3 veces a la semana durante este año¨. Esta propuesta sí es posible comprobarla y medir el alcance de tu meta.

Tener planes para el nuevo año debe ser una razón para iniciarlo motivados. Los objetivos deben ser retadores, que nos inviten a salir de nuestra zona de confort, y a la vez alcanzables para no transitar por la frustración que nos invite a dejarlos a medias. Disfruta el camino para conseguirlas, es esencial tenerlo en cuenta para mantener el estímulo vivo. Cada cierto tiempo, tal vez cada 2 o 3 meses según lo decidas, puedes hacer una revisión del objetivo, indagar en lo que has alcanzado hasta ese momento y mantener o modificar la estrategia hacia el cumplimiento de tu meta.