La piel es el órgano más grande del cuerpo y es el que lo soporta todo: cortes, quemaduras, golpes, etc. Nuestra piel es nuestro escudo, un escudo que también necesita que lo protejan, especialmente del sol. Por eso, a continuación te daremos tres consejos básicos para protegerla y mantenerla sana especialmente durante esta temporada.
- Hidrátate
Existen muchas teorías, que si son 6, 8 o 10 vasos de agua. La verdad no pasan de teorías, ya que no existen estudios que certifiquen la cantidad de agua que debes tomar. Lo que sí te recomendamos es que aprendas a leer tu cuerpo y no te pases todo un día sin consumir agua. Por otro lado, el agua no es la única fuente de hidratación. Las frutas y verduras también son capaces de hidratar tu cuerpo. Consume frutas y verduras jugosas como la sandía y el pepinilo y mantén tu piel hidratada.
- Alimenta tu piel
Una correcta nutrición puede ayudarte a tener tu piel lista para la temporada que se viene. Aquí te ponemos una lista de alimentos y vitaminas que no debes olvidar consumir:
- Alimentos con vitamina A, que ayudan a tratar el daño por el sol y la celulitis: zanahorias, pimentón, pimiento rojo, camote, verduras de hojas verdes, calabaza, lechuga, albaricoques secos y el melón.
- Alimentos con vitamina C, antioxidantes, regeneran la vitamina E y proveen protección solar: naranja, brócoli, kiwi, tomate, espinaca, limón, fresas, y melón.
- Alimentos con vitamina D, que reducen las manchas:pescados grasos, hígado de res, queso, yema de huevo, etc. Además, esta vitamina, se produce naturalmente en nuestro cuerpo cuando nos exponemos al sol.
- Alimentos con vitamina E,antioxidantes que protegen contra el daño solar y el envejecimiento: Aceites vegetales de maíz, nueces, semillas de girasol, hortalizas de hoja verde, etc.
- Elige un buen protector solar
Existen dos tipos de rayos ultravioletas con distintos efectos sobre nuestra piel: los UVA(broncean de inmediato, penetran hasta la capa más profunda de la dermis causando envejecimiento y cáncer de piel) y los UVB (El 90% es bloqueado por el ozono y por el oxígeno de la atmósfera. El daño más grave en el cuerpo es que queman el tejido.) Ambos tipos son potentes factores de riesgo.
Por esta razón, muchos dermatólogos recomiendan utilizar protectores solares que tengan en su etiqueta la indicación de protección solar de amplio espectro, ya que son los únicos capaces de proteger tu piel de ambos tipos de rayos ultravioletas. Así que no te olvides de preguntar por ese tipo de protector la próxima vez que vayas a la farmacia.
Otro tip importante es buscar un producto que sea resistente al agua y al sudor, lo que significa que mantiene su SPF 40 minutos después de estar en el agua, mientras que el "muy resistente al agua" puede durar hasta 80 minutos.
Este verano, tu piel y tu salud son lo más importante. ¡Así que toma nota y prepárate para cuando caliente el sol!